PASO 1

Ponemos en una sartén aceite de oliva, freímos dos rodajas de pan y reservamos.

PASO 2

En la misma sartén hacemos un sofrito de cebolla, pimiento verde y puerro. Cuando esté todo bien pochado añadimos el pimentón y los cocinamos 20 segundos, añadimos los tomates rallados y dejamos todo a fuego lento 10 minutos.

PASO 3

Ponemos el sofrito en el vaso de la batidora, le incorporamos un poco de caldo de pescado y lo pasamos por la batidora.

PASO 4

Ponemos en una cacerola los garbanzos previamente remojados en agua durante doce horas, añadimos el sofrito y el caldo de pescado caliente hasta que éste esté tres dedos por encima de los garbanzos.

Lo ponemos a fuego medio aproximadamente 3 horas y media, si hubiera que añadir más caldo durante la cocción añadirlo siempre caliente.

PASO 5

Ponemos en el mortero un poco de sal y encima los ajos picados y empezamos a machacar, después añadimos el pan troceado y seguimos machacando. Finalmente añadimos la yema de un huevo cocido y un chorrito de aceite y mezclamos bien.

Media hora antes de que los garbanzos estén cocidos lo añadimos.

PASO 6

Para hacer los rellenos cortamos el pan en rodajas, lo ponemos en un bol y le añadimos la leche, dejamos que se empape bien.

Escurrimos el pan y lo ponemos en otro recipiente junto a un diente de ajo y un huevo. Mezclamos hasta incorporar bien todos los ingredientes.

PASO 7

Ponemos a calentar aceite sin dejarlo que se caliente demasiado. Con la ayuda de dos cucharas vamos haciendo bolas y los freímos en la sartén, después los sacamos a un papel absorbente y reservamos.

PASO 8

Picamos las espinacas y las damos un hervor de cinco minutos. Colamos y reservamos.

PASO 9

Diez minutos antes de que acabe la cocción de los garbanzos incorporamos el bacalao previamente desalado, también incorporamos las espinacas y los rellenos.

PASO 10

Emplatamos decorando con huevo cocido.